Felicidad: ¿realidad o mito?


Felicidad, esa gran aliada y amiga,
pero, ...¿siempre natural?.


En general, la Felicidad es un estado de ánimo que se produce en la persona cuando cree haber alcanzado una meta deseada. Tal estado propicia paz interior, un enfoque del medio positivo, al mismo tiempo es un estímulo para conquistar nuevas metas. Es definida como una condición interna de satisfacción y alegría

Normalmente la relacionamos con lo segundo, es decir, con sentirnos alegres, sonrientes, pletóricos, animosos. Pero lo cierto, es que tiene que ver más con lo primero: la Satisfacción.

Es imprescindible sentirse satisfecho con lo que uno, en definitiva, ES. Lo que significa que tenemos que sentir que somos "nosotros mismos" en todo momento. Cuando la información de sucesos que ocurren a nuestro alrededor nos gusta, nos es más fácil conectar con ellos; y por tanto, hacer crecer ese halo de felicidad o "buen rollo", y que flote en el ambiente con mayor agilidad y estímulo. 

Cuantas más personas compartan uno o más puntos de entendimiento, mayor será la propagación de ese estado. Por tanto, no es que se contagie por arte de magia, sino que es indispensable "conectar" con lo que nos rodea, tanto en la forma, como en el contenido de la información que recibimos.

La Felicidad es conexión




Sonreír no expresa necesariamente felicidad. Así como estar serio, tampoco tiene que representar necesariamente lo contrario. Todo es cuestión de las circunstancias que rodean a cada momento y el enfoque que le damos, lo que hace que nuestro ánimo se muestre con diferentes caras.





Sí que es cierto que HAY algo que da vida a cualquier estado que presentemos, y su importancia es tal, que representa la base de nuestra felicidad:


                                                         "Ser Uno Mismo"








La frase (Pablo Neruda): 


"La felicidad es interior, no exterior; por lo tanto, no depende de lo que tenemos, sino de lo que somos."






La felicidad es el resultado emocional e involuntario, fruto del encuentro inevitable que se produce entre lo externo y lo interno.

Esto significa que nuestro cerebro tiende a hacerse su propio concepto de todo lo que le rodea, aplicándolo como base a cualquier ámbito de la Vida. Lo que define de manera concreta una opinión, un carácter y un comportamiento, propios de cada individuo.

La Felicidad es completamente apática a la hora de hacer distinciones entre el Bien o el Mal, ya que su sino es el de aportar una emoción positiva a nuestro ser, en un grado que depende exclusivamente de la aceptación que brindemos a los sucesos que nos rodean; percibidos a través de nuestros sentidos, y que nuestro cerebro valora y cataloga, dándoles la importancia que NOS merecen. Esto es en base a nuestra forma de ser y de ver el mundo. Siendo entonces, ¡y sólo entonces!, cuando se abre el proceso de la satisfacción personal, dotando a cada circunstancia e instante de un determinado grado de aceptación. Lo que indica finalmente, el Nivel de Felicidad Personal

Por tanto, -y esto es muy importante-, Se Es Feliz cuando catalogamos de "positiva" la información o sucesos que nos llegan, lo que hace que nos volquemos y rindamos ciegamente a sus "encantos". Pero también sucediendo lo contrario, si las consideramos como "negativas", lo que nos incomoda a diferentes niveles

Por naturaleza tendemos a "quedarnos" con lo positivo, lo correcto o lo bueno, ya que el estado en el que nos sumerge nos gusta y motiva, pero que se trata sólo del convencimiento de que la Percepción y Actitud que brindamos a la Vida y "sus circunstancias", es la óptima para nuestro desarrollo y estabilidad personal, pese a la multitud de variantes que lo puedan condicionar, y que lógicamente, cuantifican (de alguna manera) lo felices que somos o nos sentimos en cada momento. 

Por esto mismo, da igual nuestro estatus social, nuestra raza, nuestro color, nuestra condición, nuestro credo o nuestro sexo. Da igual las circunstancias que nos toca vivir, -para unos más fáciles y para otros terriblemente difíciles; para unos con mucho, mientras para otros con casi nada-, porque lo que realmente nos va a aportar un mínimo o un máximo grado de felicidad, es la CONVICCIÓN DE QUE NUESTRA ACTITUD ES LA CORRECTA; y que se basa principalmente, en la percepción que hagamos del mundo y la propia Vida.

Percepción

Y claro, esto ya desemboca irremediablemente, en lo que para cada uno significa la Felicidad o lo que le hace sentirla; y que no tiene necesariamente que coincidir con la valoración que hagan los demás o una mayoría, ya que su espíritu brota de lo que considera cada uno como "correcto", "necesario" e "importante". Es decir, aquello que nos satisface internamente. 

Es por ésto, que nuestro ánimo es tan frágil o vulnerable, y se resiente con suma facilidad, ya que a nada que sentimos que lo que hacemos o hacia dónde nos dirigimos, no cubre nuestras expectativas o atenta contra conceptos más básicos; como la Libertad, el Equilibrio o la Paz Interior, (el "YO" interno = "lo que somos"); la Felicidad decae. Y lo hace a razón del grado de insatisfacción que se sufra, pudiendo perdurar en el tiempo mientras no se encuentre el camino que nos lo pueda hacer evitar. 

Pero no queda aquí todo, hay algo todavía peor que hace que en el fondo sea todo más difícil aún, y es que la Felicidad nunca podrá ni acercarse a una plenitud completa, mientras no seamos capaces de trabajarla en conjunto. 

Y es que por mucho que nos sintamos felices, por mucho que una mayoría se sienta también feliz, ..su suma y el resultado final, nunca podrá alcanzar el nivel ni el grado al que se llegaría de ser compartida de manera global. 

Es como lo que ocurre con nuestras Neuronas, su desarrollo y evolución es máximo cuando todas contribuyen a un proyecto común. Es decir, la suma de un esfuerzo global hace posible un resultado infinitamente mayor, que el que se desprende de la suma de iniciativas individuales o de la unión de diferentes grupos. Siendo esto mismo lo que ocurre con nuestras posibilidades de Desarrollo, Evolución y Felicidad. 

¡Sed felices!. (Es decir, vosotros mismos, y quedar satisfechos del resultado).

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