Humanidad desvirtuada.
Leer noticia aquí.
Corte del texto (Iñaki Gabilondo):
"Rajoy, el fugitivo. Imaginar al presidente en Doñana fumándose un puro durante el debate produce vergüenza democrática. Se comportó como un jefe de estado B que no necesitamos para nada."
Opinión:
Lo cierto, es que éso es lo menos que se espera de "ésta clase de dirigentes".
Y no es que sea, él o cualquier otro, de un estado "B", sino de uno "C". Ya que quién manda es EEUU, luego Alemania y, finalmente, el de cada país.
Éso, sin contar para la medición, la mediocridad y el poco respeto que se muestra por el puesto que desempeñan y su encomiable papel.
Y si se quiere hablar del sentimiento de VERGÜENZA, -que hasta eso parece desvirtuado-, lo verdaderamente vergonzoso es que los dirigentes permitan y se esfuercen en promover unos valores que hunden a sus ciudadanos en una vida llena de sufrimientos y sin ningún futuro. Y, por otro lado, que éstos, en lugar de unirse y protestar por algo tan aberrante, se les siga lamiendo el suelo por donde caminan. Como justificando, encima, y reverenciando tales actuaciones y ejemplos.
¡Ésto sí que me parece vergonzoso!.
Como si con salir a la palestra a decir lo indignante que resulta todo, cambiara algo.
Y lo más triste de todo, es la pasividad ante la unión y el compartir de un sentimiento común, que exija un tipo de gobernanza responsable y comprometida para con el pueblo y la propia Vida.
Este señor es José "Pepe" Mujica, mandatario uruguayo de corte humilde y sincero, lo que seguro no es del agrado de todos, ni lo hace en perfecto, pero tiene algo que falta a los dirigentes y dignatarios de todo el mundo, y es su entrega y pasión por una vida sosegada, útil y sutil.
Podemos ver en la riqueza que viven todos los que se dedican a dirigir los pasos de los pueblos, ya sea en la política, en la economía, la defensa o la fe. El lujo, las extravagancias y el despilfarro están a la orden del día, y donde su único pensamiento se sitúa en vivir bajo las alas del poder y todo su influjo.
Lo malo de esto, es que se les olvida el porqué están ahí y el para qué.
Se les olvida que se deben exclusivamente a su pueblo, y que si su idea es la de vivir a cuerpo de rey y a costa de vender a sus ciudadanos, que se larguen, se hagan autónomos y se monten su empresa privada. Porque estando de dirigentes, su obligación es trabajar para mejorar las condiciones de vida y futuro de su pueblo. Siendo conscientes en todo momento, de que son el ejemplo a seguir, y que sus decisiones nos llevarán a todos por una senda u otra; lo que supone una inmensa responsabilidad por su parte, pero también por la nuestra, que tendríamos que vigilar de que fueran buenos pasos.
Y es que al parecer, todos olvidamos lo que supone ser "humano".
Comentarios
Publicar un comentario