Políticos Sin Dignidad ni Honra.

Texto:

"En España las opciones políticas siempre han estado claras: 

de izquierda o de derecha".

Sí, aunque sea una vergüenza y una infamia, es lo que parece.

Por desgracia esta es la realidad que hemos construido entre todos. Y el problema es, que aun siendo así, increíblemente, todo sigue bajo una 'normalidad' pasmosa. El ciudadano parece que tengas las tripas hechas a todo, -cosa, realmente preocupante-, porque significa que se ha dado por vencido. Y en el mejor de los casos, resulta que sigue confiando en sus dirigentes; a pesar de tener conciencia de lo corruptos e interesados que son, junto con el sistema que "nos quieren encular".

Sea como sea, que la sociedad grite "libertad, derechos, transparencia, responsabilidad, justicia, ética, ...", no deja de ser una incongruencia del propio ciudadano, que primero tenía que aclararse, y después tomar determinación para alcanzar las metas que quiere como individuo y como parte integral de una sociedad. Entre ellas, su futuro y estabilidad.

La vida pasa, y con ella las oportunidades de enmendar este desaguisado. A día de hoy, los tópicos siguen calando más fuerte que los hechos. Solo hay que ver, por ejemplo, como la única diferencia entre nuestras formaciones políticas está en el "traje de faena". Solo esto ya es para pensárselo. Adoptan la figura del camaleón para adaptar un porte determinado que les acerque a esa parte del pueblo, que según dicen, pertenecen. Y colar, la verdad es que cuela. Consiguen esa afinidad requerida para el voto y el devoto; lo que no se si es por mérito de ellos o de 'su' pueblo. Más bien diría que de lo segundo. Y es, precisamente, lo que no comprendo. No solo sisan nuestros bolsillos, se cargan nuestras esperanzas y futuro, nos engañan con sus 'trampamejas' o ponen las leyes de su parte; es que además, nos dicen que nos representan y que se preocupan de su pueblo. Pues, menos mal que lo hacen, oye.

Pero sigo diciendo lo mismo, vaya tripas que tiene el pueblo para seguir ofreciendo el beneplácito a estos señores de pacotilla. Éso, sin olvidar a nuestros estimados dirigentes sindicalistas. Otros, que también dicen ser 'nuestros hermanos' y luchar por un frente común. También se colocan el traje de faena para cumplir con los tópicos, mientras las mariscadas van que vuelan. ¡Tendrán que comer!, dirán. Sí, pero no a nuestra costa, y más cuando estáis ayudando al sistema que nos destruye. Pero, claro, es la ley de la supervivencia: "comes o se te comen". Y si se puede 'trabajar' tocándose la barriga, para qué meterse en problemas. Que hay que ser un poco o bastante judas, pues bueno, ¡se es!.

Lo cierto, es que este sistema nada gana con gente cabal y de noble comportar, por eso será imposible que algo cambie. Bueno, a no ser que el pueblo comience a tenerlo claro y exija una conducta a la altura de la raza que representa; con la que NOS atribuimos una inteligencia y otras bondades que, como poco, debemos tenerlas olvidadas, porque ni están, ni se les espera.


Feliz futuro incierto, insufrible e injusto.

Nuestros hijos, sus hijos y los hijos de éstos, siempre nos lo agradecerán en el alma. Aunque no se si el planeta resistirá a tanto.