De luto constante

Inundación 29/10/24

España está de luto

La humanidad está de luto, permanentemente.

Y es que, como humanidad, no hemos aprendido a considerar lo que es prioritario para vivir, y crecer conforme a ello. Ya podríamos aprender de los animales y las plantas, que sí saben adaptarse a la Vida y vivir bajo sus reglas. De hecho, casi todo lo malo que pasa es por nuestro mal hacer para con la Vida (naturaleza y medioambiente).

Vivimos, como si nuestros propósitos estuvieran por encima de los de la propia Vida; y de ahí, que no dejemos de estar de luto constante.

Es muy triste que ocurran tantos desastres, sólo porque nuestra especie no haya aprendido a "crecer y desarrollarse de manera equilibrada y en armonía con la Naturaleza". Porque, a día de hoy, deberíamos saber cómo hacer mejor todo, ¿no?. Y no sólo en cuanto al respeto que se le debe dar a la Naturaleza con respecto a los espacios habitables y su definición; sino, también, a la comprensión de que la Vida no necesita acoplarse a nosotros, sino que somos nosotros los que, inevitablemente, necesitamos acoplarnos a la Vida.

Si comprendiéramos esto, sabríamos qué es lo importante hacer y cómo hacerlo, para crecer y transmitir esos valores a los que vienen detrás. De hecho, hay infraestructuras modernas, con pocos años de vida; llevadas a cabo bajo los más estrictos controles y rigurosos estudios de todo tipo, y pensadas para soportar todo tipo de efectos medioambientales, que han quedado inutilizables.

Y de los incendios, ¡¿qué decir?!.
Vamos por ahí sembrando fuego y quemando bosque, entre otras muchas cosas más.

Es decir, que por mucho que se quiera creer, y se nos insista, en que "avanzamos", la realidad es otra. Lo que vamos creando, incide de manera negativa en el mundo en el que vivimos, haciéndolo más insostenible y virulento, tanto a nivel macroscópico, como microscópico.

Es ese desequilibrio y ese descontrol, lo que no deja de ocasionar catástrofes.

Éste era el pronóstico de la Dana (Depresión Aislada en Niveles Altos), el 29 de octubre, unas horas antes.




Satélites orbitando, aparatos de medición de todo tipo, Institutos profesionalizados en este tipo de tareas, y ¿para qué?. ...¡Pero si ni siquiera funcionaron las alertas de emergencia en los móviles!.
Es nefasto.

Por más adelantos tecnológicos y técnicas avanzadas, lo cierto, es que a la humanidad solo le importa la imagen de su persona, de su cuerpo y ostentación en general.
Ya pueden venir todas las catástrofes del mundo, que de quedar con vida, volveremos a lo mismo de siempre.

Se siente rabia, tristeza e impotencia, ante tanto fracaso.

Mi más sentido pésame a los familiares de las víctimas. Que descansen en paz.

Mi más sentido pésame y enorme tristeza, por ser parte de todo este sinsentido, donde nunca llegamos a comprender que las cosas solo pueden ir bien, si se hacen bien. Que hacerlas regular, ya es hacerlas mal. Y esto comienza en el pensamiento de cada uno de los habitantes del planeta; porque es de ahí de donde todo surge: dirigentes, modelo de crecimiento, actitud, comportamiento, rendimiento, sostenibilidad, eficacia, equilibrio, armonía.

Nuestro pensamiento y actitud, determina el mundo en el que vivimos; haciéndolo mejor o peor habitable. Pero lo cierto, es que se busca el caos, para después hacer la inversión adecuada y que nadie se pueda negar o criticar. ¡Hasta ese punto llegamos!, dando poca importancia a la vida de las personas.

Nos guste o no, todo es política. Porque a la sociedad, a "éste tipo de sociedad" que han conseguido domesticar a su gusto, se le ha de manipular así. Se le ha indicar las cosas de esta manera, ya que por sí mismos, no sabemos ni en qué se gasta el Estado el dinero que recauda. ¡Ni siquiera eso!.

Ánimo para todos los afectados. Pero, de una manera u otra, todos somos los afectados. Cuando el volcán en la isla de La Palma, en Canarias, más de lo mismo. Pero allí era un número muy inferior de personas y una población mucho más pequeña. Pero contando, igualmente, con todo tipo de instrumentos y de profesionales para avisar con tiempo.

Toda catástrofe es muy triste, pero si se cobra vidas, ya es devastador.

Imagen 1. NoName_13 (Px)

Comentarios

Entradas populares de este blog

El sentir del alma (Benedetti)

La rueda de la vida (E. Sabato)

Aborígenes del mundo

Si no se vive el presente, no se está vivo.

Abrir el corazón, duele (Benedetti)

Destino (Ernesto Sábato)