No existe la privacidad.
Solo hay que pensar en el porqué de las aplicaciones "gratuitas" que nos descargamos tan felizmente. Y es solo un pequeño ejemplo, de tan gigante complot de captación de información. Se podría aplicar a las descargas, a la wifi, el bluetooth, ..e infinidad de cosas más.
Gobiernos, Estados, Agencias de seguridad o espionaje, empresas, ..se "matan" por esa información. Que, a nada que sea alguien con una mínima relevancia, -por la información a la que puede llegar-, más papeletas tiene para ser vigilado.
De hecho, podrían llegarnos notificaciones de aviso, llamadas o, incluso, la presencia de la autoridad competente, para hacernos las reclamaciones o denuncias que les sean pertinentes, y sólo con que un señor mire datos de nuestra información, a través de una pantalla de ordenador.
Tan solo al escribir nuestra opinión o gustos, y que no se consideren correctos o aptos para "la buena convivencia social", para el desarrollo de una empresa, grupo de gente o institución, ya es motivo de estudio.
Bonito, ¿verdad?..
De hecho, podrían llegarnos notificaciones de aviso, llamadas o, incluso, la presencia de la autoridad competente, para hacernos las reclamaciones o denuncias que les sean pertinentes, y sólo con que un señor mire datos de nuestra información, a través de una pantalla de ordenador.
Tan solo al escribir nuestra opinión o gustos, y que no se consideren correctos o aptos para "la buena convivencia social", para el desarrollo de una empresa, grupo de gente o institución, ya es motivo de estudio.
Bonito, ¿verdad?..
Y no solo ésto. Los aparatos cada vez los hacen con más funciones, que en principio pueden parecer muy chulas, pero que esconden la captación de toda información posible. Huellas táctiles, reconocimiento de caras y de voz, ubicación por mapa o fotos, (aunque no la tengamos conectada, porque hay repetidores de señal que nos sitúan), miden nuestro nivel de estrés, de agresividad, de ansiedad, ..con quién nos relacionamos, cuándo y de qué manera. Cuándo dormimos, cuando hacemos ejercicio, cuándo compramos, cuándo ..todo.
Ahora, solo habría que pensar en LO FÁCIL QUE SE LO PONEMOS, A AQUELLOS QUE PUDIERAN, (¡Y QUE SON MUCHOS!), PARA SUPLANTAR LA INFORMACIÓN QUE QUISIERAN, E IMPLICARNOS EN CUALQUIER HISTORIA QUE LES DIERA LA GANA.
Tienen la información, porque se la damos; y tienen los conocimientos, los medios y la falta de escrúpulos que se lo permiten realizar. Lo que significa, que estamos expuestos a una amenaza, no solo de vulnerabilidad de la privacidad, sino de una posibilidad real de suplantación de datos, comprometiéndonos a todo aquello que consideren necesario, haciéndolo público y ofreciendo una realidad maquillada y tramposa de nosotros, resultando casi imposible desenmascarar tal trama y estafa. Y de poderlo hacer, el descrédito, desprestigio y sufrimientos, ya no tienen vuelta atrás. Porque, no es que las circunstancias se alineen para meternos en problemas, es que HACEN QUE SE ALINEEN para conseguirlo.
Estamos vendidos. Y más, cuando nos dedicamos a ponerles en bandeja, toda nuestra vida a sus pies, contando todo lo que nos ocurre, hacemos o pensamos hacer. De hecho, hay personas que se relacionan muchísimo más a través de los aparatos, o comparten más de su "yo", que de persona a persona. Si.., eso que se solía hacer antes.
Comentarios
Publicar un comentario