Elegid quién ser

Elegir el Bien o el Mal

Lectura del Libro de Josué 24, 1-2a. 15-17. 18b

En aquellos días, Josué reunió a las tribus de Israel en Siquén y llamó a los ancianos de Israel, a los jefes, a los jueces y a los magistrados. Y se presentaron ante Dios.

Josué dijo a todo el pueblo:
«Si os resulta duro servir al Señor, elegid hoy a quién queréis servir: si a los dioses a los que sirvieron vuestros antepasados al otro lado del Río, o a los dioses de los amorreos, en cuyo país habitáis; que yo y mi casa serviremos al Señor».

El pueblo respondió:
«¡Lejos de nosotros abandonar al Señor para servir a otros dioses! Porque el Señor nuestro Dios es quien nos sacó, a nosotros y a nuestros padres, de Egipto, de la casa de la esclavitud; quien hizo ante nuestros ojos aquellos prodigios y nos guardó en todo nuestro peregrinar y entre todos los pueblos por los que atravesamos.

También nosotros serviremos al Señor: ¡porque él es nuestro Dios!».

/> Aquí se nos dice: "...elegid hoy a quién queréis servir".

Es decir, dejemos de postergar el momento y decidamos de una vez a quién servir y (añado) quién queremos ser. Porque si no tomamos una decisión, tampoco sabremos quién ser.

Sí. Claro que no es fácil. Y menos cuando se van a recibir críticas y rechazo por ello. Eso no ayuda. Pero lo que se nos pide es que decidamos de una vez, en qué creer. 

No es que se vaya a cambiar de repente, ni mucho menos. La Creación acoge todo bien por poco que sea. Lo que tampoco hay que confundir, y tomarlo como una invitación a no comprometernos y dar lo poco que nos plazca, y cuando nos venga bien. 

Sobe todo, porque sucede algo muy curioso, y es que cuanto más nos acercamos al Bien, más necesitamos de él. Y esto es por la sensación de paz interior, bienestar y satisfacción por la convicción de que lo que hacemos está bien. Pero hasta no decidirnos a creer en ello, no podremos experimentar tal sensación.

El Bien nos ayuda a tener convicciones fuertes y justas. Nos ayuda a afrontar los problemas y dificultades con actitud firme y valiente. Así como a disfrutar de las alegrías con humildad y gratitud.

Aún con todo, elegir este camino no es nada fácil. No por ello la vida se nos va a plantear más llevadera y con menos cargas. 

En realidad, la vida tiene de todo, y así es para todos.

La diferencia radica, en que haciendo el bien, estamos dando lo mejor a la Creación. Y esto es importante, porque Ella nos acogerá de nuevo un día. Nos acogerá de la manera en la que estábamos antes de venir a este mundo, y donde, sin duda, la Verdad es la única realidad que existe.

Por tanto, nuestra verdad quedará al descubierto y marcará la nueva vida que llevaremos. Ya sea por la eternidad, o por otro periodo de tiempo.

Sea como sea, la Vida continuará.

Ayudemos a que las nuevas generaciones sepan elegir cuánto antes. Es importante para saber quién se quiere ser.


Imagen: Engin_Akyurt (Px)

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